miércoles, 20 de febrero de 2008

Volver

Uno se va de vacaciones , corta un poco con la realidad , se sumerge en los fabulosos paisajes del Cuyo, con sus montañas, sus lagos ...y sus vinos .
Cuando vuelve, se encuentra que la dinámica de las cosas es tal que sin dudarlo se iría de nuevo.

Incendios, desidia , corrupción y dolor en la capital, politiqueria barata, y ...que lejos estamos ! ética , inteligencia y claridad conceptual.
Se va el viejo Fidel, con el que se podrá estar mucho, poco o nada de acuerdo en muchas cosas, pero que es indudable que posee un nivel de estadista enorme, al cual muchos políticos y nosotros los de a pié deberíamos leer y re-leer, entre líneas y todo, para aprender un poco.
Uno que ha crecido con la Revolución y la figura del Caballo como parte de las constantes de la vida, no puede menos que sentir que, una importante etapa de la historia de las sociedades se termina y se siente el cosquilleo- con ligera envidia ?- de las novedads que se avecinan, entendiendo que es una sociedad que , concientemente, enfrenta el desafío de renovarse y permanecer o perecer.