martes, 31 de diciembre de 2013

Des- balances

No tengo claro que sea útil o necesario hacer un balance a fin del año de cómo nos fué en la vida, en lo laboral o en el país en general. Sin embargo resulta muy difícil escapar a la fascinación que tiene la fecha 31 de Diciembre de cada año. Este particular fin de año no deja de ponernos,nuevamente al límite,con esa capacidad que tienen los diciembres de exponernos en veinte días al abismo. Es la suma del calor, de las necesidades, de la falta de interés por el otro ? Es sugerente cómo episodios de violencia social- sea por robos en banda fogoneados por las policías o por el asalto al bienestar más básico como la falta de electricidad nos empujan a todos,afectados o no,a lugares últimos donde parece que somos incapaces de dar respuesta.
En tanto hemos sido objeto de la categorización de consumidores,el derecho a la seguridad pública y el derecho a una determinada calidad mínima de vida como el acceso a la seguridad cotidiana que brinda la electricidad se tratan como un bien de consumo, accesible a los que tienen recurso -económico o cultural- para ejercerlo. No parece que estemos dando respuesta como colectivo social sino como conjunto agregado de individuos que tratan de salvarse si pueden.
Es una victoria importante la que el neoliberalismo ha logrado sobre el tejido social, que no puede organizarse en respuestas solidarias. No todo es culpa de las dirigencias, emergentes de un cuerpo social. Los animales políticos podemos discutir responsabilidades mayores o menores en la desatención del problema de las policías, garantes armados de la capacidad de vigilancia y control del Estado. Podemos revisar los límites que tiene el dejar al alcance del lucro y el beneficio privado materias tan sensibles como el acceso a la electricidad o cualquier matriz de energía. Podemos revisar el rol de las dirigencias como responsables, pero lo central es que a la sociedad como cuerpo , estos problemas no la interpelan , salvo cuando entra en la FALTA. Reclamar a los gritos cuando nos FALTA habla de que somos incapaces de sentarnos a discutir , pensar y problematizar lo que queremos como modelo social.
Y eso , gurisada, es que en ese campo, todavía el neoliberalismo nos viene ganando.
Hasta el año que viene