lunes, 26 de agosto de 2019

Sordos Ruidos . Política, ciencia y tecnología.

5000 es el número.

El sábado 3 de agosto , un encuentro fogoneado por el Frente de Todos reunió a 5000 personas discutiendo planes y políticas públicas sobre Ciencia y Tecnología en más de 50 comisiones y con más de 200 expositores.


El Frente denominó y citó a esa reunión como el Encuentro Nacional de Equipos Técnicos.


Lo primero que interesa rescatar es la potencia del número.  Es evidente que no hay otra fuerza política capaz de reunir ese volumen de personas , con formación superior, puestas a pensar y discutir aspectos y propuestas para vincular a la Ciencia y a la Técnica como tractores específicos en un proyecto de desarrollo nacional.

En palabras de Fernando Peirano, responsable de CyT del Frente de Todos acá , "Argentina ha sabido conformar un sistema de Ciencia, pero cuando hablo de sistema no me refiero a una estructura gubernamental, sino a tres características o capacidades. La primera es la posibilidad de formar recursos humanos, (...) La segunda característica es una articulación de los elementos y la tercera es que haya una orientación política que le asigne misiones a ese sistema."
Peirano destaca la intención de formar también un sistema tecnológico que tenga " capacidad también de formación de recursos humanos, capacidad de articular los elementos con los que contamos, como son los proyectos nucleares, satelitales, radares, Conectar Igualdad. Esto marca una agenda de tareas a hacer: hay que restaurar lo que teníamos al 2015 y proyectarnos más allá, reconocer los límites estructurales que habíamos alcanzado por la recuperación y puesta en valor de la Ciencia Argentina. "
Esta agenda se elabora pensando al Estado como actor principal del programa, porque su rol de planificador, orientador de recursos y protagonista a nivel de los institutos de ciencia y tecnología del Estado no puede ser desestimado.

Se piensan así por ejemplo desde el rol de poder de compra del Estado, definiendo no solamente los bienes sino también el perfil de las necesidades que amerita un bien a desarrollar, lo que potencia el uso del aparato científico y tecnológico articulado con un entramado productivo  nacional, federal y pyme. El sistema de radares meteorológicos o los satélites son el ejemplo del caso.

Se define qué es lo que se necesita, y eso justifica la potencia de un entramado de CyT para desplegar el cómo se resuelve  esa necesidad.

Este conjunto de técnicos, académicos , institutos de investigación estatales, desplegados en toda la nación no deja de ser un colectivo heterogéneo, diverso pero con un saber y un propósito que los vincula.

¿Alcanza con eso?
¿Es suficiente la preocupación de un sector de la academia por el uso del cluster de CyT como un vector más en un programa de desarrollo?
¿Que tiene que decir nuestra sociedad sobre ésto? 
¿Se debe dejar el despliegue de CyT a los científicos y tecnólogos o la sociedad tiene que participar de alguna manera en el compromiso político-ideológico que implica una política activa de CyT ?
Si la respuesta es por la afirmativa, el camino a recorrer desde el punto de vista comunicacional es arduo y complejo.

Podemos decir que la “esfera pública” se define a partir de un conjunto de personas privadas que se reúnen para debatir sobre los asuntos públicos. Lo “común” entonces se construye en el ámbito de lo público como resultado de una acción colectiva. Esta acción es el resultado de un intercambio que es comunicacional y que se manifiesta en el espacio o el territorio de la cultura.


La comunicación entonces, es imprescindible en el proceso de desarrollo que significa la creación de políticas públicas que resultan ser el espacio natural de configuración e implementación de los derechos sociales de los ciudadanos.

Puede convenirse en que toda política pública es manifestación y puesta en práctica de una concepción sobre la sociedad y sobre el modelo de desarrollo que se quiere alcanzar. 
El espacio de tales políticas es necesariamente un ámbito de diálogo, de intercambio, de debate y también de lucha política.
La importancia de la participación de ésta sociedad civil reside en que ella provee de los agentes implicados por la situación con sus conocimientos y necesidades específicos y que en los procesos de gestión e implementación las políticas públicas ganan legitimidad a partir de una mayor participación en su diseño y de mejores acuerdos de partida. 

En este mes sanmartiniano que termina, tras los muros, los corceles y el acero son ensillados y afilados por los pueblos.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario