La realidad de nuestra América es de una dinámica y velocidad que no da tregua. Sólo los latinoamericanos de sangre caliente podemos intentar manteneros a flote y comprender. Pero no podemos dejar de actuar.
La hidra ataca de nuevo.
Antes fue Honduras, ahora intenta Ecuador, y vendrá más temprano que tarde a intentar en Bolivia y Paraguay.
Atención.
Repudio a cualquier intento desestabilizador.
ResponderBorrarVamos Correa!
Y a cerrar filas por la democracia en la región.