martes, 13 de abril de 2010

Bloguerías

Mucho antes del análisis de los discursos, de la semiósis social, del mito, de la constitución del campo y de todas esas cosas con las que algunos nos divertimos y tratamos de poner la cabeza en funcionamiento, un tal Miguel de Cervantes escribía acerca de un espíritu de lucha que enfrenta al débil frente al poderoso, aún cuando la empresa sea quijotesca.
Ladran Sancho, señal de que cabalgamos... es una frase que remite a un movimiento que , aunque suene absurdo, es observado, registrado y tenido en cuenta.
La reunión del sábado pasado ha sido comentada por
El Conu, por Gerardo, documentada en video, retomada por Artemio, por Diego. No fué la primera, en estos últimos tres o cuatro años se han realizado algunas.
Uno de los cambios que aparecen ahora, es que los diarios y los programas de radio comienzan a tener sus propios blogs. No ya una plataforma del diario on-line sino un lugar que ADMITE respuestas, opiniones, pensado dentro del paradigma del servicio al cliente de la empresa global.

Sin embargo el fenómeno bloguero, que es usado en tapa de Clarín para erosionar al Gobierno, no aparece comprendido claramente por los medios.
Los blogs generan contenidos propios, y su circulación es a través de la red.
Esos contenidos son individuales, personales. Los post que se suben reflejan una visión inorgánica , son una multiplicidad de voces. Podemos criticar o no ,todo , parte, poco , mucho de las acciones del Gobierno, pero lo hacemos desde nuestras posiciones personales. Ahí se rompió el contrato de objetividad falsa que nos ha dado la voz hegemónica de las empresas de comunicación de la clase dominante.
Parafraseando a
Stalmann, nosotros somos dueños de nuestro propio código, porque somos dueños de nuestros contenidos. Somos dueños de dar visiones personales, de discutir, de acordar y disentir sin más límite que nuestros saberes y nuestras áreas de interes.
No somos una escuela de pensamiento, sólo individuos que usan la herramienta comunicacional de internet para responder a los escribas del poder ,obligados por las reglas actuales del arte a poner sus casillas de correo corporativas o a leer los comentarios, de la misma forma en que lo hacemos entre nosotros.
El hecho político nuevo, como hablábamos ese sábado con
El Dotor, es que la cosa pública es discutida en un ámbito ,un ágora para usar un término caro a Mario Wainfeld, donde el medio es interpelado por su lector.
Por supuesto que los cincuenta bloguerXs que más escriben , son personas a las que la política les resulta un tema de interés. El punto es que los medios actúan como la Iglesia Católica Apostólica, los únicos con saberes para opinar sobre los misterios. Y todo lo demás es
anatema.

3 comentarios:

  1. Muy bueno, Canilla. No es, en verdad, la función de los elementos sino el uso que de estos elementos hacemos. O, aun peor, el mal uso.
    Y es que la blogosfera es tantas cosa a la vez.

    Por eso: Ladran, Sancho... ;)


    Un saludo, bien cordial!

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  2. Amiga, tanto tiempo que no se la ve! Me recuerda que tengo que hacer un post a propósito del juez Garzón.

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