La política es una forma de hablar de las cosas cotidianas, que preocupan el chapista en Tortuguitas al que le llevé el auto, y al inspector del Organismo Provincial de Desarrollo Sostenible ( OPDS) que ayer hizo una inspección en la fábrica sobre efluentes, tratamiento de envases y demás.
La política, 201 años después de la Revolución de mayo, no es vergonzante. Se admite que es necesario hablar de algo que refiere a toda nuestra cotidianeidad, aunque Sarlo crea que la gente no habla de política, como dijo en 678.
Quizá la diferencia es que las categorías de análisis y terminología que usa mucha gente no son las que usa ella habitualmente. Es lógico . No pretendo hacer una defensa de la gente , llegando al lugar común berreta de que lagente habla así y ellos ( los intelectuales) no. Primero porque probablemente yo me entienda mejor con la señora Beatriz antes que con el chapista. Segundo porque no es cuestión de volver a aquello de alpargatas si, libros no.
Simplemete tomo nota de que cada uno a su manera, piensa en la cosa cotidiana y en el futuro mirando el pasado.
Recordar la historia intentando comprender el presente, para modificarlo en función de una intención de futuro es hacer política.
Eso es lo que está pasando, hoy, a 201 años de que a otros les pasara lo mismo.
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